Emprender un proyecto requiere de la influencia de diversos elementos y de una persona o un equipo preparado en varios ámbitos para obtener los resultados deseados. 

No es posible hablar de una fórmula mágica  que te lleve automáticamente al éxito, pero sí podemos adquirir ciertos conocimientos sobre componentes cuantitativos y cualitativos que te permitan analizar mejor el entorno externo e interno de tu empresa para tomar mejores decisiones que te permitan ser más competitivo en el mercado.

En esta entrada te presentaré 12 tips de carácter cualitativo, que aunque parecen muy obvios, suelen dejarse de lado y que sí pueden marcar una diferencia en el futuro de tu proyecto:

1. Define tu meta: No sólo se trata de saber qué es lo que quieres conseguir al llevar a cabo tu proyecto, sino de evitar modificar tu meta constantemente, es un error muy común que provoca que tu empresa no pueda estabilizarse, ya que cada meta es diferente y cada una requiere necesidades diferentes para poder ser alcanzada.

2. Define tu marca: Es importante introducir tu empresa al mercado con un distintivo que la haga fácilmente reconocible entre tus potenciales consumidores por encima de tu competencia.

3. Entiende a tu audiencia: Tú puedes estar encantado con el producto o servicio que ofreces, pero éste no necesariamente debe gustarle a los demás, debes entender qué es lo que se está demandando allá afuera para entender qué es lo que tú puedes ofrecer.

4. Crea la necesidad: Éste punto no es nada fácil de conseguir, y puede variar mucho de acuerdo al servicio o producto que se ofrece, sin embargo, usar como referencia la “Pirámide de Maslow” es un buen comienzo para reconocer la necesidad que deseas satisfacer.

5. “Enfócate en las soluciones”: ¡¡¡¡NO LO HAGAS!!!! Es importante (y todo un talento) tener la capacidad de resolver problemas y situaciones conflictivas, sin embargo, las personas suelen desarrollar su plan de negocios en función de los problemas que posiblemente tendrán que enfrentar a futuro, esto se traduce en el gasto de recursos como el dinero y el tiempo. 

   En vez de desarrollar una serie de estrategias en las que tengas que esperar a que sucedan cosas negativas para después resolverlas, desarrolla estrategias que, directamente, te ayuden a evitar caer en esos problemas.

6. Trabaja constantemente: Muchas veces es fácil desistir o dejar de lado tu proyecto; una forma práctica para evitar esto es por medio de un cronograma de actividades, te mantendrá trabajando constantemente en tu empresa y te será más fácil alcanzar tus objetivos y tus metas.